La audición es uno de los sentidos que nos sirve para mantener contacto con las personas a través de la comunicación y gracias a el, podemos apreciar los sonidos del ambiente que nos rodea.
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Normalmente somos los que nos quejamos de que la persona adulta mayor no oiga bien, sin darnos cuenta de que pueden estar pasando por los cambios como los que voy a mencionar más adelante.
Los mayores de 6 años tienen un 38% menos de audición, y los mayores de 85 años, un 60% menos.
Los cambios más presentes en la audición con la edad son:
La Presbiacusia, que es la pérdida progresiva y gradual de la audición, la persona tiene dificultad en la percepción de sonidos altos, no puede distinguir el tono o la voz. Es más frecuente en los hombres que en mujeres.
El taponamiento de Cerumen, es la causa más importante de sordera de conducción, en muchos adultos mayores con problemas para escuchar suele pasar desaparecida.
Los factores de Riesgo que se presentan para este sentido son: - La diabetes
- Sífilis
- Otitis supurada.
- Lesiones por traumatismo craneano.
- Haber trabajado en ambientes con alta contaminación de sonido.
Medidas para el autocuidado del oído:
- Evitar exponerse a ruidos.
- No usar audífonos con música a volumen alto.
- Limpiarse el oído con mucho cuidado, no introducir objetos en el oído para limpiarlo.
- Si desea extraerse el cerumen, acuda a una persona entrenada para eso.
- Si padece de sordera, considere la posibilidad de usar audífonos especiales para oír mejor.
- Manifieste las dificultades que tiene al oír.
- No se aplique gotas al oído sin autorización.
- Si sufre problemas de audición, no se limite a conversar, dialogar y participar en la interacción con las personas que les rodea, ya que a pesar de los cambios que pueden afectarlo, no debe aislarse.
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